El Mundo se encamina a incumplir todas las promesas sobre las emisiones de CO2

Sustentabilidad

El FMI propuso aumentar las sanciones para quienes desparraman carbono a 85 dólares por tonelada y multiplicar las inversiones actuales por 18
Duro. Muy duro es el diagnóstico del Fondo Monetario Internacional (FMI) sobre el compromiso mundial para el cambio climático. Con datos concretos, elípticamente, aseguró que el Mundo no llegará a las emisiones cero en 2050. En un informe, el organismo consignó que “los actuales compromisos climáticos solo reducirán un 11% las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero de aquí a 2030”. Las razones: la escasez de inversiones, que deberían multiplicarse 18 veces, y porque no todavía no existen las tecnologías para alcanzar el objetivo.

Caramente los políticos del Mundo siguen firmando cualquier cosa, probablemente con la expectativa de que la cumplan los demás, porque las políticas habituales “conducirían a un incremento de las emisiones mundiales anuales de aquí a 2030, y darían lugar a un nivel acumulado lo suficientemente elevado para incumplir la meta de 1,5 °C para 2035”.

En un informe llamado “Para alcanzar los objetivos climáticos es necesario aumentar la ambición política, los fondos privados y la innovación” el Fondo determinó que para mantener el aumento de las temperaturas por debajo de los 2 °C los países de deberán reducir sus emisiones drásticamente de aquí a 2030: 39% los países de ingreso alto, 30% los de ingreso medio alto, y 8% los países de ingreso medio y bajo. “Para lograr esas metas más exigentes, se requieren cambios políticos de gran envergadura que, idealmente, se centrarían en fijar un precio robusto para el carbono, de modo que este aumentara a un promedio mundial de, al menos, 85 dólares por tonelada para 2030”, estimó.

Según el organismo, el precio del carbono también permitiría recaudar suficientes ingresos presupuestarios para respaldar a los grupos vulnerables. “En torno al 20% de los ingresos de la tarificación del carbono pueden compensar con creces al 30% más pobre de los hogares. Esta medida es diametralmente opuesta a las perjudiciales subvenciones a los combustibles fósiles, cuyos costos fiscales explícitos aumentaron hasta alcanzar la cifra récord de 1,3 billones de dólares anuales” el año pasado.

Según los cálculos del fondo, el Mundo debería aumentar las inversiones en proyecto de bajas emisiones de carbono de aquí al 2050 de 900.000 a 5 billones de dólares para 2030. En particular, los países menos favorecidos (emergentes y en desarrollo) necesitan un total de 2 billones de dólares anuales, lo cual supone quintuplicar el monto que recibieron en 2020. “Incluso si las economías avanzadas cumplen su promesa de aportar 100.000 millones de dólares al año, el grueso del financiamiento de estas inversiones de bajas emisiones de carbono deberá proceder del sector privado”. Y agregó: la porción de financiamiento para el clima que aporta el sector privado en los países menos favorecidos “debe aumenta del 40% al 90% para 2030. Esto hace necesario adoptar una amplia combinación de políticas dirigidas a superar obstáculos como los riesgos cambiarios y de políticas, los mercados de capital poco desarrollados y la escasez de proyectos en los que se puede invertir” agregó.