Encuentran un método casero para eliminar los plásticos del agua para el consumo

Sustentabilidad

Es muy simple. Fue hallado por científicos chinos, con resultados publicados recientemente por la Sociedad Estadounidense de Química, y permite eliminar el 90% de los micro y nano plásticos del agua de la canilla.

Los plásticos ingeridos por los humanos están en todas partes. Desde el agua contenida en los tanques cisterna, en los “piletones” de las empresas purificadoras, y por supuesto, en el agua que recogen para su posterior potabilización. Los efectos documentados de su exposición incluyen deterioro del sistema nervioso, problemas reproductivos, desarrollo de enfermedades como cáncer, leucemia y, tienen impactos genéticos tales como bajo peso al nacer. Cada micro plástico individual podría descomponerse en 1.000.000.000.000.000 de partículas más pequeñas, llamadas nano plásticos.

Una investigación publicada en la revista Environmental Science and Technology Letters, de la Sociedad Estadounidense de Química (con sede en Nueva York) dio a conocer un método casero para separar las macropartículas plásticas del agua que se consume. Aunque es trabajoso y lleva algo de tiempo, el proceso consiste en tres pasos simples, baratos y eficientes. El primero: hervir el agua para consumo durante cinco minutos. El segundo, dejarla enfriar. Finalmente, filtrarla a través de algún filtro denso, como un filtro de café. Los científicos determinaron que ese método de limpieza de plásticos es eficaz para eliminar hasta el 90% de las micro y nanos plásticos del agua de la canilla.

La clave de todo el proceso está en la espuma formada en el agua hervida. Durante el proceso de ebullición, el carbonato, en forma de espuma, captura las partículas y actúa como "encapsulante". Así, los micro plásticos quedan separados del resto del líquido. Y el filtrado de la espuma, que contiene micro plásticos, permite eliminar considerablemente el plástico contenido en el agua.

Plásticos omnipresentes

El hallazgo fue realizado por un grupo de investigadores de Guangzhou (China) liderado por dos científicos reconocidos en la comunidad de los químicos: Zhanjun Li y Eddy Zeng. La experiencia llevada a cabo en un laboratorio con agua de la canilla, logró eliminar hasta el 90 % de los micro y nanos plásticos que flotaban en el agua de la canilla. Los mismos resultados se obtuvieron con agua blanda, en la que se logró eliminar un 25% de los plásticos presentes en la muestra. "Esta estrategia de hervir agua puede "descontaminar" el agua de la canilla doméstica, y tiene el sencillo potencial de aliviar de forma inofensiva la ingesta humana de nano y micro plásticos a través del consumo de agua", escribieron los autores.

Los micro plásticos están, lamentablemente, en casi todas partes: en los hielos de ambos polos, en la leche…, en la sangre, los pulmones, el cerebro humano y hasta en las placentas de las embarazadas. Los plásticos que flotan en el agua son ingeridos por la fauna marina, se acumulan en su interior, o bien pueden quedarse en suspensión o flotando en la superficie. Pueden también hundirse y permanecer en el fondo de ríos y mares, e incluso pueden quedar atrapados en los hielos. Claramente son tóxicos y afectan la producción hormonal, lo que aumenta el riesgo de enfermedades graves. Y obviamente también se encuentran en el agua de la canilla, aun cuando los filtrados de las empresas de aguas permitan concluir que se trata de agua potable.

Toneladas al agua

Las principales fuentes de los micro plásticos identificadas en ríos, mares, y océanos no son solo los envases que terminan desaprensivamente en el agua. En la reunión de la ONU de la semana pasada en Nairobi se denunció que la humanidad arroja 2.300 toneladas anuales de plásticos, y que se estima que en 2050 se tirarán 3.800 toneladas. De ese total, 46% va a la basura, fluyendo por los ríos hasta llegar a los océanos. Solo el 22% se controla, el 17% se incinera y el 9% se recicla. Pero, además, las fuentes de micro plásticos del agua aparecen en lugares “invisibles” a la vista cotidiana:

  • Textiles sintéticos: considerados uno de los principales contribuyentes a los micro plásticos. Cada vez que se lava una prenda de poliéster u otro textil sintético, suelta pequeñas partículas que se van por el desagüe y, de ahí al río o al mar.
  • Desgaste de los neumáticos: parte de las partículas de plástico de los neumáticos que quedan en las carreteras son arrastrados por las lluvias a los desagües y los cursos de agua naturales.
  • Polvo en las ciudades: incluyen partículas procedentes de la abrasión de objetos como las suelas sintéticas del calzado y los utensilios de cocina, los céspedes artificiales, los revestimientos de los edificios y de los puertos deportivos, las actividades de construcción y la descomposición de la basura plástica.
  • Las pinturas con las que se señalizan las calles, las de los automóviles y barcos, los contenidos en los productos de limpieza y belleza y los pellets de plástico usado en la industria para fundir piezas. Muchísimas actividades que usan plásticos va a parar al agua.

Los micro plásticos también son arrastrados por el viento. Científicos registraron que, del cielo, en un lugar supuestamente libre de contaminación como el de los Pirineos (en el límite entre España y Francia) caen diariamente 365 partículas de micro plásticos por metro cuadrado. ¿Se imagina el lector qué valores darían si las mediciones se hicieran en las grandes urbes, como Buenos Aires?