Uruguay y Francia más cerca que nunca

Para lograr la neutralidad de carbono para 2050 y sostuvo reuniones uno a uno con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el presidente de Italia. La Primera Ministra Georgia Meloni en la jornada de clausura de la cumbre UE-Celac en Bruselas.

Lacalle firmó el acuerdo en nombre del país sudamericano y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, lo hizo en nombre de la UE. También firmaron la Comisaria de Energía de la UE, Kadri Simson, y el Ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Francisco Bustillo. Según el nuevo documento, la energía renovable es una prioridad junto con la eficiencia energética y el uso de hidrógeno verde.

“La UE y Uruguay comparten la ambición de aumentar el uso de fuentes de energía renovables, en línea con nuestros ambiciosos objetivos climáticos. Estamos alineados con la necesidad de un mercado global de hidrógeno basado en reglas, transparente y sin distorsiones”, dijo Von der Leyen.

“Con esta firma concluyen con éxito las negociaciones sobre energías renovables. El instrumento consolidará los avances para consolidar a Uruguay como proveedor de hidrógeno verde y el establecimiento de un marco común que dará fluidez a este comercio”, dijo la Cancillería uruguaya en Twitter, mientras que el Ministerio de Industria publicó que el acuerdo significaba “llegar al carbono neutralidad en 2050”, que destacó como “un pacto histórico que tendrá como uno de sus pilares la promoción de la industria del hidrógeno verde”.

En su discurso ante el pleno, Lacalle argumentó: “Es muy difícil para mí explicarles a mis hijos adolescentes que nos ha costado 25 años llegar a un acuerdo en este mundo que ha cambiado tanto”. Hizo esos comentarios con respecto al acuerdo comercial UE-Mercosur que aún no se ha finalizado.

Macron ha sido uno de los principales opositores al acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur firmado en 2019, que no fue ratificado por las naciones europeas por preocupaciones de incumplimiento de estándares ambientales como el Tratado de París por parte de los países sudamericanos.

“No es posible un acuerdo con los países latinoamericanos si no respetan los acuerdos de París como nosotros y si no respetan las mismas restricciones ambientales y sanitarias que imponemos a nuestros productores”, había dicho en marzo el líder francés.

En septiembre de 2021, Macron insistió en que “Francia está en contra del Mercosur como se está negociando hoy y seguiremos estando muy claramente en contra. No porque no estemos cómodos con nuestros amigos del Mercosur, sino porque por definición, este acuerdo, tal como ha sido concebido y diseñado, no puede ser compatible con nuestra agenda climática y de biodiversidad”.

En ese escenario, Lacalle subrayó que no cree en un “proteccionismo exacerbado” y abogó por avanzar en el acuerdo entre la Unión Europea y Mercosur. “Como representantes de América Latina, somos conscientes de nuestras fortalezas y debilidades”, subrayó Lacalle.

Lacalle también destacó el ánimo de sus pares latinoamericanos pertenecientes al bloque de pactar a pequeños pasos. “Nos parece algo bueno en este mundo interconectado y acelerado donde lo que tenemos que fortalecer y recuperar es la confianza”. Pero agregó que el optimismo crítico “es lo que nos dice que es momento de avanzar”.

“Basta de palabras y de 25 años de negociaciones”, afirmó al tiempo que destacó los estándares democráticos de Uruguay, el desarrollo humano, el cuidado del medio ambiente, la solidez institucional y el respeto a la ley, “que es lo que nos hace viajar por el mundo y participar de estos encuentros. con los brazos abiertos."

“Creemos mucho en la integración y entendemos que muchos países se protegen, pero lo que no entendemos es el proteccionismo exacerbado”, dijo.

“Tenemos una oportunidad preciosa para tomar las decisiones que se requieren y retomar la confianza, entre nosotros, entre nuestros pueblos, y la de las personas que nos ponen al frente de nuestros países”, subrayó.