Logran replicar la energía solar, pero...

Energías Limpias

Luces y sombras del avance científico de fusión nuclear como fuente inagotable y limpia de energía para combatir el cambio climático

Científicos establecieron un nuevo récord en la generación de energía por fusión nuclear. Lo anunció la Autoridad de Energía Atómica del Reino Unido (UKAEA). El logro, obtenido en Joint European Torus (JET) cerca de Londres, reavivó las esperanzas sobre la fusión nuclear como una fuente inagotable y limpia de energía, capaz de combatir el cambio climático. Hasta ahí, la noticia. Pero, cuidado con la generación de expectativas desmesuradas. Se trata de un avance científico significativo, pero que todavía está muy lejos (muchísimo) de mitigar los problemas de la escasez de energías limpias para las próximas generaciones humanas.

Para comprender de qué se trata, cabe consignar que la fusión nuclear es el proceso que alimenta la energía (y la luz) del Sol. Funciona calentando y forzando la unión de partículas pequeñas, para formar un cuerpo más pesado que libera energía útil. O sea: el avance replica la capacidad de generar energía del Sol por lo que, si se ampliara, podría producir cantidades infinitas de energía limpia sin emisiones de carbono. A diferencia de la energía eólica y solar, esta emergía no depende de las condiciones climáticas. El tema es que el experimento, que costó decenas de millones de dólares, produjo 69 “megajulios” de energía durante solo cinco segundos. Es la energía suficiente para cuatro o cinco baños calientes o “energía para 41.000 casas durante cinco segundos” informaron los científicos. El experimento de JET no generó más energía de la que consumió.

El avance es notable, pero claramente es solo un paso más del mundo científico, pero claramente la humanidad todavía está muy lejos de plantas de energía de fusión nuclear.

La instalación Joint European Torus (JET) se construyó en Culham, Oxfordshire (a unos 13 kilómetros de la Universidad de Oxford y 94 kilómetros de Londres), a finales de los años 1970. Hasta finales del año pasado era el reactor de fusión experimental más avanzado del mundo. Aunque tiene su sede en Reino Unido, fue financiado principalmente por el programa de investigación nuclear de la UE, Euratom, y operado por la Agencia de Energía Atómica de Reino Unido. Durante cuatro décadas captó a científicos de Reino Unido, Europa, Suiza y Ucrania. Se suponía que el reactor solo estaría operativo durante aproximadamente una década, pero los repetidos éxitos hicieron que su vida se prolongara.

La última prueba de este “chiquitín” se hizo en 1997. El resultado anunciado este jueves triplica el obtenido en pruebas similares de aquél año. Y ahora no se prevé realizar otras grandes pruebas a gran escala hasta el año 2035. El sucesor del Euratom del JET es una instalación llamada ITER que tendrá su sede en Francia que cuenta con la participación de potencias mundiales, incluyendo China, la UE, India, Japón, Corea del Sur, Rusia y Estados Unidos. Originalmente estaba previsto que el proyecto estuviera activo en 2016 y a un costo de más de 5.300 millones de dólares. Pero desde entonces, el presupuesto se cuadriplicó y su puesta en marcha se retrasó hasta 2025.