El Parlamento Europeo resolvió endurecer las normas sobre la calidad del aire

Sustentabilidad

Pide más puntos de muestreo y la creación de índices armónicos en toda la Unión, para que los ciudadanos se protejan frente a umbrales de alerta
El Parlamento Europeo respaldó endurecer las normas sobre la calidad del aire en los 27 Estados miembros, con límites más estrictos para los principales contaminantes (como las partículas finas o el dióxido de nitrógeno) con el propósito de alcanzar una contaminación cero en 2050. Actualmente se estima que la contaminación del aire es la causal más importante de muertes prematuras en la Unión (300.000 muertes prematuras cada año). Frente a eso la Comisión Europea propuso en octubre una revisión de las normas para reducir en una década más del 75% de los fallecimientos relacionados con la suspensión de partículas contaminantes.

La ley revisada por la Eurocámara para mejorar la calidad del aire, establece límites más estrictos para el año 2035, con valores objetivo para varios contaminantes, como las partículas (PM2,5, PM10), el dióxido de nitrógeno (NO2), el dióxido de azufre (SO2) y el ozono (O3). Las modificaciones fueron respaldadas por 363 diputados, frente a 226 en contra y 46 abstenciones. La idea es que los ciudadanos puedan protegerse durante los niveles elevados de contaminación y antes de que se alcancen los umbrales de alerta obligatorios.

Las nuevas disposiciones del Parlamento, que ahora deben negociarse con el Consejo Europeo y la Comisión Europea para dar forma al texto definitivo de la ley, apuntan a que el aire no sea perjudicial para la salud humana, los ecosistemas y la biodiversidad, incorporando con las últimas directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El texto subraya, la necesidad de aumentar el número de puntos de muestreo sobre la calidad del aire. Establece que debe haber un punto de muestreo por cada dos millones de habitantes (en lugar de cada cinco millones propuestos por la Comisión). Pero en aquellos lugares donde sea probable una mayor concentración de partículas, carbono negro, mercurio y amoníaco, debe haber uno por cada millón de habitantes.

La Eurocámara también pidió que se armonicen los índices de calidad del aire para que estos sea comparables, claros y transparentes para el público, con actualizaciones cada hora. También quieren que se facilite la información sobre los síntomas asociados a los picos de contaminación y los riesgos para la salud asociados a cada contaminante, incluida información adaptada a los grupos vulnerables.