Desde 2003 se reciclaron más de 4.000.000 de toneladas de plástico en Argentina

Sustentabilidad

En los últimos 20 años, el reciclaje de plásticos se multiplicó por cinco al pasar de 57.100 toneladas por año en 2003 a más de 294.000 en el año 2023.

 Durante este tiempo, se reciclaron más de 4 millones de toneladas. El sector de la economía circular busca impulsar una ley para incentivar la práctica, pese a la resistencia del Gobierno de Javier Milei.

La asociación civil sin fines de lucro Ecoplas dio a conocer un informe sobre el desarrollo sustentable de los plásticos en la Argentina durante las últimas dos décadas del que se desprende un aumento en la concientización de la sociedad y de las empresas respecto al cuidado del medio ambiente.

Con motivo de los 20 años del Índice de Reciclado que la organización realiza junto a la Cámara Argentina de la Industria de Reciclados Plásticos (CAIRPLAS), se difundieron las últimas cifras del relevamiento del que se desprende que desde 2003 se reciclaron más de 4.000.000 de toneladas de plástico en Argentina, un peso equivalente a 99.500 aviones comerciales.

Creció por cinco el reciclaje de plásticos: de 57.100 toneladas en 2003 a 294.000 en 2023

Si en 2003 se reciclaban unas 57.100 toneladas de plástico anuales, para finales del 2023 la cifra se quintuplicó hasta rozar las 300.000 toneladas. Desde Ecoplas indicaron que gracias a ello se evitaron emisiones por más de 5.700.000 de toneladas de CO2 a la atmósfera.

“El Índice de Reciclado confirma que la tendencia hacia el cuidado del medio ambiente es creciente, con una mirada también de desarrollo productivo hacia una economía circular. La industria recicladora nacional ya cuenta con más de 140 empresas que apuestan por la economía circular en 19 provincias”, destacó Verónica Ramos, Directora Ejecutiva de Ecoplas.

Actualmente, en Argentina hay más de 140 empresas en 19 provincias que forman parte de la industria recicladora mecánica que permite transformar plástico en nuevos productos. La economía circular, un modelo superador al de la economía lineal (producir, consumir, desechar) permite que los recursos se utilicen por más tiempo y que, en su debido momento, puedan ser transformados en nuevos productos finales, reduciendo la contaminación.

Poco a poco, las prácticas tradicionales (economía lineal) están dando paso al cambio de paradigma de la economía circular. El modelo de las 3R (reducir, reutilizar y reciclar) está evolucionando por las 7R (rediseñar, reducir, reutilizar, reparar, renovar, reciclar y recuperación energética), con el objetivo de que los residuos se conviertan en recursos para iniciar nuevos ciclos productivos sustentables y eficientes.

“Es importante concientizar sobre los beneficios y la necesidad de hacer esta transición hacia la circularidad. Esta construcción tiene su eje en la promoción del ecodiseño, las políticas públicas, los ecosistemas colaborativos, la innovación, desarrollo de infraestructura y logística y la educación ambiental para que los plásticos sean responsablemente consumidos, reutilizados y reciclados. Se trata de un trabajo colaborativo que debe articularse con el accionar del sector público, las empresas, las asociaciones y la ciudadanía”, expresó Ramos.

Además de la práctica mecánica, la petrolera YPF cuenta en su estructura con una planta piloto que implementa reciclado avanzado. Se trata de un conjunto de innovadoras tecnologías de recuperación y revalorización que complementan al reciclado mecánico y transforman los residuos plásticos para, a partir de ellos, producir nuevas materias primas. De esta manera, se puede lograr convertir los residuos plásticos en sus componentes originales, lo que permite potenciar el reciclado.

Ecoplas coordina la Red de Economía Circular donde empresas líderes, junto a Delterra, trabajan en el desarrollo de proyectos sobre categorías de residuos plásticos y logística inversa.

Políticas públicas y marcos regulatorios

La implementación de políticas públicas y cambios normativos tiene gran relevancia en la transición hacia la circularidad. Los capítulos más destacados incluyen el trabajo en normalizaciones con el Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM) para la fabricación, el reciclaje y el ecodiseño.

En Argentina, la asociación impulsa una ley REP (Responsabilidad Extendida del Productor). Según destacan desde Ecoplas, la relevancia se respalda en experiencias globales como el caso español, donde tras la aprobación de la ley la cantidad de envases reciclados creció 37 veces. En la región, países vecinos como Brasil, Chile y Uruguay ya cuentan con leyes similares para la gestión de residuos de envases de todo tipo de materiales.

La propuesta de Ecoplas choca con la postura del Gobierno, y en particular contra la del Presidente, respecto al impacto del calentamiento global. Para Milei, se trata de "otra de las mentiras del socialismo". "Hace 10 o 15 años se discutía que el planeta se iba a congelar. Ahora discuten que se calienta, aquellos que conozcan cómo se hacen esas simulaciones van a ver que las funciones están sobresaturadas en determinados parámetros a propósito para generar miedo”, dijo en la campaña legislativa del 2021.

Ecodiseño y educación

De todas maneras, la iniciativa de reciclado cuenta con un importante apoyo de la sociedad argentina. Según una encuesta elaborada por Opinaia para Ecoplas, el 43% de los argentinos está predispuesto a pagar más por un producto hecho con plástico reciclado.

En Argentina existen dos ecoetiquetas promovidas por Ecoplas que facilitan la circularidad de los plásticos: la Manito certifica envases y productos plásticos monomateriales y actualmente certificaron más de 80 empresas en el país; y la Certificación de Contenido de Plástico Reciclado, formulada en colaboración con el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), avala la trazabilidad y la proporción de un mínimo del 15% de contenido de plástico reciclado en los productos finales.

Además, la asociación consolidó sus iniciativas de educación y concientización ciudadana a través de la clase “Consumo responsable y economía circular de los Plásticos” en el Programa Escuelas Verdes del Ministerio de Educación del Gobierno de la Ciudad, donde ya se formaron 6500 alumnos y 348 docentes; también capacitaciones a cooperativas de recuperadores urbanos y la publicación de la Guía de Economía Circular de los Plásticos, con información útil y práctica para un consumo más consciente y responsable.

"Con el Índice de Reciclado de plásticos y todas las acciones que venimos impulsando, queremos reafirmar nuestro compromiso con la economía circular de los plásticos para que continúen aportando beneficios tanto al medio ambiente como a la sociedad. La visión de un futuro donde los plásticos no solo formen parte de nuestra vida diaria, sino que también contribuyan a la protección del medio ambiente y a la mejora de la calidad de vida de las personas, es posible.", finalizó Ramos.